sábado, 17 de octubre de 2009

¡CUIDADIN TERREMOTORLLLL!

Estamos que nos salimos. Últimamente generamos más noticias de las que cabría esperar en una villa y corte tan humilde como la nuestra.
Casi nada, esta vez no nos quedamos en las primeras matas que digamos, y después de la lotería de Goyito, ni mas ni menos que un terremoto de 3,7 en la escala “del Richí” se ha atrevido a perturbar nuestra paz sacudiendo nuestras tierras y causando el estupor y el alboroto de nuestro lugareños.

¿Qué será lo próximo?. Se admiten las apuestas señores. Por primera vez en la historia de este bodrio-blog (que diría mi fiel Juncal) pongo una encuesta por si os apetece participar,- no seáis somarros y darle caña, que sólo hay que pinchar en la opción deseada - pa luego echarnos unas risas con la respuesta ganadora.

Así quedo el nuevo tramo de la cuesta los collaillos. 3 años más de obras al canto.

Volviendo al terremoto en cuestión y como afortunadamente no hemos tenido que lamentar daños personales ni materiales, pues qué queréis que os diga, yo al menos me lo he pasado pipa con los informativos y lo bien que dan en pantalla algunos de nuestros paisanos.
Nos gusta chupar cámara y ya estamos deseando liarla parda otra vez. Como sigan viniendo tantos reporteros, vamos a tener que imitar a la Faraona diciendo eso de : “si me queréis, irsen”.

En cualquier caso, no es mi intención ser excluyente, pero los que hayáis seguido los noticiarios coincidiréis conmigo en que la auténtica “estrella” mediática ha sido Julio (más conocido como Julito o polluco para los amigos), casi nada lo del ojo.
Para comprobarlo, y para que lo veáis los Villarenses que estáis fuera de la región, me complace ofreceros un video de un noticiario conquense y que agradezco a nuestro paisano Marcos “El Curilla”, que lo ha colgado en la red y ha tenido la gentileza de compartirlo.



Andaros expectantes ante el minuto 0:54 ya que nuestro “actorazo” se saca de la manga una escena que ríete tu del Bardem ese.
Para empezar, buen vestuario Julio, genial esa camisa que igual te vale para gestionar la “oficina” (ordenador del pleistoceno que arranca a manivela en una mesa que se cae a cachos rodeada de Bollicaos y chupachups), que para llevártela a la cañá de las cuevas y poner encima la frasca de vino, la tortilleja y los filetes empanaos.

En la explicación del suceso acaecido Julius no tiene rival, decir aquello de “más cuento que Calleja” es quedarse mu, pero que mu corto. La imaginación al poder amigos.
Cuánto daño ha hecho el cine de catástrofes. Lo del “ordenata que blinca”, pasará a los anales del humor. Desde Benny Hill no me reía tanto. Gracias Julito, hermoso, por ese momentazo inolvidable.
Y es que, paisanos y demás lectores, donde esté una historia bien contada, que se quite todo, a mi no me jodas.

No hay más que ver a Toñi, esposa de nuestro hoy protagonista. Es un placer observar cómo esta damisela, ebria de amor, lanza a su apuesto cónyuge esas miradas de complicidad y ardiente deseo. Qué virilidad, qué fuerza de la naturaleza y qué protección de la pareja, esa mano agarrando el hombro y apretando cual garrote vil, vamos, que ni la legión española -cabra incluida- serían capaces de arrancar a su amada de un macho alcarreño tan gallardo y bien plantao.



De toas maneras y fuera ya de cachondeo, si queréis saber lo que pasó de verdad, y explicado como mandan los cánones de la zona, escuchad atentamente (minuto 1:43) a Mister Desiderio. Con dos frases épicas deja zanjado el tema como Dios manda, ojo al dato : “Sentí así como una explosión y se pasó en ná” y “otros dicen que vieron moverse las cosas, yo no las ví”.

Real como la vida misma amigos.